Deducción del IVA soportado: guía para empresas en 2025

Entender cómo funciona la deducción del IVA soportado es fundamental para optimizar la fiscalidad de cualquier empresa en España. Aplicarlo correctamente permite recuperar el impuesto pagado en compras y gastos, mejorando el flujo de caja.

En esta sección de nuestra Guía del IVA en España, te explicamos todo lo que debes saber para deducir el IVA de forma segura y efectiva en 2025.

¿Qué es la deducción del IVA soportado?

La deducción del IVA soportado consiste en restar el IVA pagado en tus compras y gastos profesionales del IVA que cobras a tus clientes. Es decir, puedes «compensar» el impuesto que has adelantado durante tu actividad económica.

Este mecanismo permite que las empresas y autónomos no soporten el coste del IVA en su cadena de producción o comercialización.

¿Quién puede deducir el IVA soportado?

Pueden deducir el IVA:

• Empresas y autónomos que realicen actividades sujetas y no exentas de IVA.
• Personas o entidades registradas como operadores a efectos del IVA.
• Empresas extranjeras que realizan operaciones en España y cumplen con los requisitos de devolución.

Es importante que los gastos estén directamente relacionados con la actividad económica.

Requisitos para deducir correctamente el IVA

Para poder aplicar la deducción del IVA soportado, se deben cumplir tres condiciones básicas:

• Relación directa: el gasto debe ser necesario para la actividad empresarial o profesional.
• Factura válida: debes disponer de una factura que cumpla con los requisitos exigidos por la Agencia Tributaria.
• Registro contable: la factura debe estar debidamente contabilizada en los libros de IVA.

Si no cumples alguno de estos requisitos, podrías perder el derecho a deducción.

Gastos que permiten la deducción del IVA soportado

Entre los gastos más comunes que permiten deducir el IVA, se encuentran:

• Compras de mercancías para su reventa.
• Alquiler de oficinas o locales comerciales.
• Suministros como luz, agua o telefonía vinculados al negocio.
• Material de oficina y equipamiento informático.
• Servicios profesionales (asesorías, marketing, etc.).

Cada caso debe analizarse individualmente, ya que no todos los gastos son deducibles al 100%.

Gastos en los que NO se puede deducir el IVA

Hay ciertos gastos cuyo IVA no es deducible, incluso si se utilizan para la actividad:

• Vehículos de uso mixto (salvo excepciones justificadas).
• Restaurantes y espectáculos, salvo en gastos de representación autorizados.
• Viajes y ocio personal no relacionados directamente con el negocio.

La Agencia Tributaria vigila especialmente estos gastos, por lo que debes ser muy cuidadoso al registrarlos.

Cómo aplicar la deducción en la declaración del IVA

Cuando presentes tu Modelo 303, deberás reflejar:

• El total del IVA soportado deducible.
• El total del IVA repercutido a tus clientes.

La diferencia será el importe a ingresar o solicitar en devolución.
En el Modelo 390 anual también deberás declarar todos los IVA deducidos a lo largo del ejercicio fiscal.

Errores comunes al deducir el IVA soportado

Es fácil cometer errores que pueden salir caros, como:

• Deducir IVA de facturas con datos incorrectos.
• Incluir gastos personales como gastos de empresa.
• Olvidar aplicar el porcentaje de prorrata, en caso de actividades mixtas (actividades sujetas y exentas de IVA).

Si Hacienda detecta errores, puede exigir la devolución del importe deducido más intereses y sanciones.

Consejos para una deducción segura del IVA

• Revisa cada factura antes de contabilizarla.
• Separa gastos personales y profesionales claramente.
• Utiliza software de facturación homologado que te ayude a registrar y validar automáticamente los datos.
• Consulta las guías oficiales de la Agencia Tributaria, como esta sección específica sobre deducción del IVA.

Invertir tiempo en una correcta deducción te ahorrará problemas y mejorará la salud financiera de tu empresa.

Conclusión: dominar la deducción del IVA soportado

Dominar la deducción del IVA soportado es clave para maximizar la rentabilidad de tu negocio y evitar sorpresas fiscales.

Aplicar correctamente esta herramienta te permitirá recuperar dinero que, de otro modo, quedaría en manos de Hacienda, y optimizar tu flujo de caja de forma segura.

Si tienes dudas sobre la interpretación de algunos gastos, te recomendamos consultar a un asesor fiscal especializado para garantizar que aprovechas todas las deducciones disponibles cumpliendo con la normativa vigente.